Metáforas de la psicoterapia corporal

Arqueología psicocorporal
Metáforas de la psicoterapia corporal

Por Miguel Angel Pichardo

La labor arqueológica ha sido una metáfora recurrente dentro del campo de la psicología y de las psicoterapias, para entender la labor terapéutica con respecto al sujeto y sus determinantes psíquicos. Esta metáfora ayuda a comprender la naturaleza, dinámica, proceso y procedimientos que se llevan a cabo en la labor psicoterapéutica. En el campo de las psicoterapias corporales integrativas, y en particular de la Psicoterapia Corporal Bioenergética (PCB), el método arqueológico resulta de gran importancia y utilidad para orientar el trabajo sobre los procesos psicocorporales. Junto a esta, también se encuentra la del rompecabezas y la del detective.



Arqueología de la corporalidad deseante


El método arqueológico en la PCB es utilizada como el referente que va guiando el contenido y el proceso de cada una de las sesiones y del tratamiento psicocorporal en general. Partimos de que la persona es un sujeto, y que este sujeto se encuentra atado a un discurso que lo precede, pero del cual también se ha servido para reconstruirlo e interpretarlo. Su historia personal es sobre todo una narración, y en ella se incardina su realidad somática y la significación de ésta en tanto corporalidad subjetiva y deseante. Este es el primer objeto de nuestra arqueología, el cuerpo subjetivado y deseante, por tanto, una corporalidad cruzada por la palabra, el discurso, el deseo, el goce, la fantasía, etc.



Arqueólogo del alma encarnada


El arqueólogo del alma, en este caso, el psicoterapeuta corporal de la PCB, llevará a cabo los pasos y procedimientos para realizar las labores arqueológicas necesarias, esto es, explorar y determinar el lugar de la excavación, acordonar el área e iniciar el proceso de limpieza, después empezara a cavar, e ira encontrando objetos, quizás pedazos de barro, y estos los ira datando de acuerdo a la capa o estrato en el cual se encontró, tratando de determinar el tipo de material, la fecha, la época, etc. y conforme continúe escarbando y descubriendo más vestigios, podrá reconstruir, a partir de ciertas hipótesis, la historia y utilidad de dicho hallazgo en el marco de una cultura, sociedad e historia determinadas.



Descifrar, ordenar y reconstruir


Este procedimiento se realizará con cada uno de los hallazgos, importantes o no, a veces sólo serán residuos o fragmentos, y sin embargo, el conjunto de estos formaran un rompecabezas a descifrar, a ordenar y reconstruir. Hasta que se encuentre la osamenta o la pirámide, y en todo caso se tendrá que plantear hipótesis sobre las razones del declive o desaparición de esa sociedad, o las motivaciones de su ocultamiento y olvido. En el fondo se trata también, de un caso policiaco, una historia detectivesca donde cada hallazgo representara un indicio, una prueba para determinar el móvil y el modus operandi del posible culpable.



Armando rompecabezas


De esta forma tenemos que el psicoterapeuta corporal no sólo realiza una labor arqueológica, sino que de esta se derivan otras dos labores, la del jugador de rompecabezas y la del detective criminal. Arqueólogo, jugador de rompecabezas y detective criminal, son también metáforas de la labor psicoterapéutica. En el momento donde se cuenta con varias piezas es necesario que el arqueólogo haga las veces de jugador de rompecabezas, ya que tiene que ordenar cada una de las piezas, encontrando su lógica interna, las conexiones y relaciones entre una y otra, comparar materiales, estilos de tallado, relación del material y forma con su uso y funcionalidad, sea esta religiosa, doméstica, de caza, política o de otro tipo. En esta labor de organización es de suma importancia encontrar la forma, esto es, una narración o hipótesis que pueda dar coherencia al conjunto de hallazgos, identificando las lagunas y las piezas faltantes, pero acercándose a una forma general del rompecabezas.



Detective de crímenes psicológicos


A la arqueología y el rompecabezas se unirá la labor detectivesca. El detective criminal busca el menor detalle, trabaja con los absurdos, los enigmas, los acertijos, busca resolver casos, identificar culpables y aportar pruebas para defender una acusación. El detectives es un observador suspicaz que puede dar cuenta de los ínfimos detalles, que junto con el trabajo de rompecabezas, logra descifrar el enigma, reconstruir la escena del crimen, identificar el papel de los actores en la historia, ubicar el móvil, las motivaciones, el arma y el escenario donde se cometió el crimen. Por lo tanto hay delito, culpables, víctimas, cómplices, secretos y traición.